Energías renovables en minería: Inversión y suministro constante como el gran desafío de su incorporación

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A ello apunta la minería verde, y especialistas en el rubro explican, en este reportaje, los beneficios del uso del hidrógeno verde en la economía y la comunidad, los desafíos que conlleva éste, además, de cómo las compañías mineras han adoptado energía solar y eólica en sus proyectos.

Santiago, 27 de diciembre de 2022

La energía renovable no es la energía del futuro, ya es del presente. Y con su incorporación se ha ido viendo que es una decisión que no solo beneficia a la humanidad en la reducción de la huella de carbono, sino también, al costo-producción de las empresas.

En este escenario, GIZ precisa que la industria minera registra un 50% de consumo de energía eléctrica, la cual, actualmente -en su mayoría- está siendo suministrada con energías renovables.

Entre los beneficios de la incorporación de energías renovables, Rodrigo Vásquez, coordinador ejecutivo del Programa de Energías Renovables y Eficiencia Energética de GIZ, asegura que “podemos destacar la reducción de costos de producción, la disminución de emisiones de gases de efecto invernadero, y la reducción de gases contaminantes locales en la generación de electricidad asociado al uso generación diésel y carbón, entre otros”.

En tanto, el director ejecutivo de la Asociación Gremial de Clientes Eléctricos No Regulados, Acenor, Javier Bustos, puntualiza que “es que no sólo es competitiva (la energía renovable) en términos de precios de suministro, sino que permite que los sectores productivos avancen en sus compromisos de descarbonización. Existe aquí una oportunidad de reducir la huella de carbono de la industria minera para avanzar hacia una minería verde y sostenible”.

Para Darío Morales, director de Estudios de la Asociación Chilena de Energías Renovables y Almacenamiento, Acera, “desde la perspectiva económica, las energías renovables permiten tener una industria minera más competitiva por cuanto ofrecen energía a menores precios y sin emisiones. Desde la perspectiva social y ambiental las energías renovables permiten el retiro paulatino de las centrales a carbón, lo que -sin duda- beneficia directamente a las localidades donde ese tipo de centrales están instaladas. Por otro lado, contar con una matriz eléctrica más limpia, nos permite avanzar en la electrificación del transporte y la calefacción, dos elementos que son responsable de gran parte de la emisión de material particulado que afecta seriamente la salud de las personas”.

Cómo avanza la incorporación de energías renovables

Bustos, de Acenor, manifiesta que “según las estadísticas que tenemos de los socios en Acenor, ya casi el 60% de la energía contratada de nuestros asociados es renovable, y con una participación creciente. Recientemente, uno de nuestros asociados, Codelco, firmó una modificación a uno de sus contratos de abastecimiento eléctrico, lo que le permitirá eliminar parte del suministro eléctrico en base a carbón por uno de energías renovables”.

Agrega que “este era un contrato firmado inicialmente en 2010 con la generadora Colbún, por 2.500 gigawatts hora al año (GWh/año), la cual le suministrará 1.000 GWh/año, gracias a sus iniciativas solares, eólicas y de nuevas tecnologías de almacenamiento, y Codelco cubrirá los restantes 1.500 GWh/año mediante un proceso de licitación que se encuentra preparando y en el que participarán empresas nacionales o internacionales, que también proveerán a la compañía de energías renovables”.

En tanto –destaca Bustos– Minera Teck Quebrada Blanca S.A. y la generadora AES Andes S.A, firmaron hace poco un acuerdo de compra de energía limpia a largo plazo para el proyecto de cobre Quebrada Blanca Fase 2. En virtud del acuerdo de 17 años de duración, AES Andes proporcionarán 1.069 gigavatios hora al año (GWh/ año) de energía procedente de fuentes renovables, para lograr un 100% de energía renovable para el proyecto minero a partir de 2025”.

Abasteciendo con energías renovables

Rodrigo Vásquez, de GIZ, advierte que “las energías renovables y la electromovilidad serán fundamentales, pero también analizando los procesos térmicos, los cuales son muy importantes e intensivos dentro de las mineras, y que se están derivando a proyectos de energía solar térmica”.

Chile tiene el potencial y la virtud de abastecer con recursos renovables -de diferente tipo- a la demanda eléctrica minera, enfatiza Javier Bustos, exponiendo que “más que una tecnología en particular, se debe desarrollar un mix de generación que permita abastecer el consumo en forma segura y a precios competitivos. Un caso particular es el hidrógeno verde, que puede ser una buena alternativa para el reemplazo del consumo de combustibles fósiles en algunos procesos productivos”.

Ejemplo de ello –añade Bustos- “son los casos de Anglo American Sur y Antofagasta Minerals, que se encuentran trabajando en desarrollos de hidrógeno aplicados a la minería. Anglo American Sur, siendo la primera empresa en producir hidrógeno verde para transporte en Chile”.

Por su parte, Darío Morales, afirma que “todas las energías renovables son necesarias. Si bien la energía fotovoltaica y eólica proveen energía a menores costos, la CSP, la biomasa, la geotermia y la hidráulica proveen flexibilidad y un suministro 24/7”.

Metas en cadena productiva minera

El director ejecutivo de Acenor, afirma que, el caso de la minera Teck y su proyecto Quebrada Blanca Fase 2, el reciente acuerdo de suministro renovable le permitirá alcanzar su objetivo de cero emisiones netas de alcance 2 (emisiones asociadas a la energía comprada) para 2025, lo que la convertiría en una de las primeras empresas de la industria minera en lograr este objetivo. También contribuye al objetivo de Teck para 2030 de reducir la intensidad de carbono de las operaciones en un 33% y, en última instancia, convertirse en un operador neto cero para 2050”.

A ello complementa que “llevamos a cabo diferentes acciones de capacitación, información y acompañamiento que permitan a los clientes libres alcanzar sus objetivos de eficiencia energética, descarbonización y reducción de emisiones. Por ejemplo, apoyando en la difusión de la plataforma Renova, que constituye el Registro Nacional de Trazabilidad de Energías Renovables del Coordinador Eléctrico Nacional”.

Por su lado, Darío Morales, el director de Estudios de Acera, asegura que “principalmente, nuestras actividades se enfocan en el monitoreo regulatorio y en la difusión de la importancia de contar un sistema eléctrico 100% renovable lo antes posible. Entre estas actividades destaca el estudio que identifica las condiciones habilitantes para lograr el retiro eficiente de las centrales a carbón hacia el 2030. Este estudio, realizado por prestigiosos consultores determinó que se requieren 22,5 GW de nueva potencia renovable para cumplir este ambicioso objetivo. Es decir, en los próximos ocho años debemos construir el doble de la potencia renovable que hemos construido en los últimos 8 años. Es un desafío sin precedentes”.

En el mismo contexto, Rodrigo Vásquez dice que “en GIZ desde hace años hemos promocionado a la minería los beneficios de la incorporación de energías renovables, como la fotovoltaica o la concentración solar de potencia. Además, hace dos años conformamos la Red Eficiencia Energética y Reducción de Emisiones de la Minería, conformada por 16 empresas del sector, con las cuales impulsamos la gestión energética, para disminuir los consumos y que a su vez ese suministro provenga de fuentes renovables; y la asistencia técnica, para proyectos relacionados con energías renovables y eficiencia energética”.

Desafíos de las energías renovables

El director ejecutivo de Acenor expone que “los costos de la transmisión, así como cargos sistémicos como servicios complementarios, han subido casi 5 veces en sólo dos años. Por lo tanto, lo que necesitamos es que se fomente más la generación renovable cerca de los centros de consumo, de manera de reducir los costos de transmisión, así como avanzar hacia un sistema eléctrico más flexible, que pueda incorporar más energía renovable de todo tipo”.

Para Rodrigo Vásquez, “el gran desafío de las energías renovables es superar su variabilidad, para dar paso a un suministro constante, lo cual puede ser compensando a través de sistemas de almacenamiento, ya sea con baterías o proyectos de concentración solar de potencia, como Cerro Dominador”.

Morales, de Acera, sostiene que “la minería, además de electricidad, requiere de energía térmica, la cual también puede ser producida directamente con energías renovables o indirectamente a través de un vector energético, como el hidrógeno”.

Ver nota publicada en Revista Minería Chilena