Son dos los consorcios que están compitiendo por Kimal – Lo Aguirre. Si bien la mega obra permitirá mayor incorporación de renovables a la matriz eléctrica, algunos gremios plantean que su avance no es conveniente.
Santiago, 14 de octubre de 2021
Fuente: Portal Energía Estratégica
El viernes de la semana pasada se dio a conocer que son dos compañías presentaron ofertas para la ejecución y explotación del proyecto de transmisión en corriente continua (HVDC), entre las subestaciones de Kimal y Lo Aguirre (Línea HVDC Kimal – Lo Aguirre -ver acta-).
Se trata, por un lado, del consorcio “Meval”, conformado por las empresas Iberdrola Redes España, S.A.U. y Celeo Redes Chile Limitada.
Por otro, del consorcio “Yallique”, conformado por las empresas ISA Inversiones Chile SpA, Transelec Holdings Rentas Limitada y China Southern Power Grid International (HK) Co. Limited.
De acuerdo al cronograma oficial, el nombre del consorcio ganador de esta licitación internacional se dará a conocer el próximo lunes 6 de diciembre, luego de realizada la ceremonia de apertura de ofertas económicas.
Este proyecto consiste en el desarrollo de una línea de transmisión en tecnología HVDC de 1.500 kilómetros con retorno metálico dedicado y dos estaciones convertidoras AC/DC.
Su proceso constructivo se estima en 84 meses para iniciar su operación hacia fines del 2028. El monto de inversión referencial es de US$1.480 millones. Según técnicos del Coordinador Eléctrico Nacional, la obra tendrá la capacidad de transportar 3.000 MW nominales, que serían destinados para proyectos de energías renovables.
Al momento de la apertura de ofertas técnicas, el presidente de la entidad de coordinación, Juan Carlos Olmedo, afirmó que “durante el período de construcción de esta línea, se estima que se generaran algo más de 5.000 empleos”.
Voces que cuestionan la obra
En una entrevista con Energía Estratégica, el director ejecutivo de la Asociación de Clientes Eléctricos No Regulados (ACENOR), Javier Bustos, planteó que toda la preparación para la obra Kimal –Lo Aguirre “ha tenido numerosos problemas en su desarrollo, lo que ha generado incertidumbre respecto de los costos finales de la misma para los clientes”.
El directivo señaló que el proyecto licitado “es distinto al aprobado en el plan de expansión original”. “A esto se suma que no se han publicado antecedentes técnicos que muestren que el proyecto en licitación, con costos más altos que los que originalmente se previeron, sea el más conveniente para el sistema eléctrico nacional”, advirtió.
“En definitiva, aun cuando creemos que un proyecto HVDC como el que se diseñó originalmente es importante para el proceso de transición energética que todos apoyamos, lo que nos preocupa es que se haya adelantado la fecha de entrada de la línea, no se haya realizado el estudio de franja originalmente previsto que debía hacerse cargo de los impactos en el territorio de una obra de esta magnitud, y que todo esto finalmente haya llevado a que los costos de la línea sean tan altos, que, si hubiéramos privilegiado alternativas con generación más cercana a los centros de consumo, el resultado para el sistema eléctrico habría sido más eficiente”, indicó Bustos.
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